…Un amor sin límites, conozco yo; un amor, vorágine
de colores. Un amor exuberante, un amor radiante
por mis hijos, por la humanidad. Un amor colorido,
un amor no enrojecido por la sangre del dolor. Un
amor violeta, un amor consumado, un amor intacto,
puro, diáfano, sereno: un amor, el Absoluto. Un amor
no corrompido, no disperso, no resquebrajado, no efímero.
Un amor absoluto en el Absoluto.
domingo, 17 de junio de 2018
Si los aretes fueran la felicidad, no existiría humano desdichado.
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